lunes, 30 de abril de 2012

RELAPSE


Éste sí que es el álbum final de Ministry. Esta vez sí que Al Jourgensen ha prometido que se apagan los amplificadores y no hay más de esta legendaria banda de metal industrial. Así, cinco años después de “The Last Sucker”, el último de esa genial trilogía dedicada a George Bush, Ministry está de regreso con un puñado de canciones que dejan una sensación extraña.

Por un lado es un álbum súper rápido, agresivo, bien guitarrero y pesado y las voces de Jourgensen suenan violentas tal como debe ser. Pero por otro lado, hay momentos donde la banda llega a pecar de ingenua, sobre todo en algunos coros y vocalizaciones. Dos pruebas de ello las encontramos en el inicio con ‘Ghouldiggers’ y un spoken bien extraño sobre la industria musical e incluso con citas a Kurt Cobain, Janis Joplin y Amy Winehouse, entre otros. La otra prueba viene en el sencillo ’99 Percenters’ con un coro que repite incesantemente “1 2 3 4 5 6 7 8 99 percenters, hey hey hey”… muy pegajoso y extraño.

Ministry venía haciendo muy bien las cosas con sus últimos 3 registros y aquí aunque es un disco correcto, donde musicalmente hay muy buenos momentos, hay detalles como los ya mencionados que impiden dejarse llevar por completo con esta placa. Aunque, de todas formas, es la misma ‘Ghouldiggers’ la que nos muestra la declaración de principios de Al por estos días: “I’m not dead yet”, haciendo clara alusión a su encuentro con la muerte de hace algunos años.

Aquí Ministry combina las temáticas de crítica social, ácida y a ratos despectiva que acostumbramos escuchar con algunos tópicos más personales, donde hay citas a las drogas o a otras experiencias privadas.

Y sí como en ‘Ghouldiggers’ se refiere a la industria, en ‘Double tap’ el aludido es Osama Bin Laden detrás de unos riffs demoledores, sonidos del medio oriente y algunos guiños programados para una canción que es un verdadero golpe industrial al mentón. ‘Freefall’ mantiene la línea más acelerada de la placa con una letra sobre la adicción a las drogas y un coro que no convence del todo. Aunque el solo de guitarra se lleva todos los aplausos.

En ‘Kleptocracy’ se baja el tempo, pero no la intensidad y la ácida crítica. El coro es súper ganchero, en la línea de lo que escuchamos en ‘Git up get out ‘N vote’, un tema con harto groove y onda, aunque a simple oída con un mensaje algo básico en sus líricas. ‘United Forces’, original de S.O.D., es una buena versión aunque de todas formas es lo que uno esperaría de Ministry. ‘Relapse’ queda al debe tanto su lírica apocalíptica como en su entrega musical. Por su parte, ‘Weekend warrior’ pasa por diferentes estados, pero sin duda lo más destacable es la fuerza vocal que alcanza Jourgensen.

‘Bloodlust’, es puro groove en sus riffs. Al comienzo es casi como si Al quisiera tributar a Pantera aunque luego la canción se va separando de ello y se alza como uno de los buenos momentos, aunque sorpresivo.

“Relapse” nos muestra un disco sumamente variado. Al industrial de siempre se le suma harto groove y coros incluso radiables. Es un disco correcto, donde Jourgensen demuestra que aún hay pasta para hacer buenas composiciones cargadas de potencia y que no sólo cubren lo necesario para ser ‘industrial’ sino que hay guiños más thrasheros, una pizca de heavy y por sobre todo riffs de guitarra súper presentes.

Si bien hay puntos bajos y a ratos se cae en la ingenuidad del lugar común, siempre será saludable contar con una nueva entrega de Ministry. A modo de final, creo que “The last sucker” era superior, aunque esta “recaída” alcanza para despedir a una de las bandas que ha marcado hitos en los últimos 30 años.




Si deseas escuchar su nuevo disco, haz click aquí: http://depositfiles.com/files/pk1hjxmfh

No hay comentarios: