“Detesto los cambios, pero no soy nostálgico”, dijo Noel Gallagher hace algunos años, y eso podría calzar ajustadamente con su actitud de arqueólogo, rescatando sonidos pasados que brillan hasta el día de hoy. Lo hizo hasta el hartazgo en Oasis y lo evoluciona con sutileza en su actividad solista, gracias a las diez canciones que encontramos en “Chasing Yesterday”, su excelente nuevo álbum con el proyecto High Flying Birds.
El nombre (en español, “persiguiendo el ayer”) encierra un concepto, una especie de cruzada en que el músico vuelve a mirar atrás, pero sin añoranza, sino con el firme propósito de construir su camino. Todo el trabajo demuestra la clase de elegancia que solo alcanzan aquellos que han aprendido de tanto mirar molinos de viento, a la usanza del Quijote. Los bronces de ‘Riverman’ nos revelan a un Gallagher más sosegado que nunca; ‘The Girl with the X-Ray Eyes’, una dulce pieza acústica, dicta que el inglés se toma las cosas con mucha más calma, igual que la introspectiva ‘The Dying of the Light’.
Al adentrarse en la obra, se descubre que la gran mayoría de estos títulos fueron compuestos para Noel: en ningún track se percibe la sombra de la voz de su hermano Liam, algo que sí ocurría con el debut del 2011. Es más, pocas de estas canciones tendrían cabida en un trabajo de Oasis, desde las ínfulas disco del single ‘In the Heat of the Moment’ y el rock à la T. Rex y Queens of the Stone Age de ‘The Mexican’, hasta la cinematográfica y cercana al jazz ‘The Right Stuff’ -que huele de cerca a Jason Swinscoe y Rolling Stones-, la refulgente marcha de ‘While the Songs Remains the Same’ y ‘You Know You Can’t Go Back’, sin duda sacada del manual de Neil Young y Bruce Springsteen. Ni siquiera la enérgica ‘Lock All the Doors’ -compuesta en 1992 y que reclama a gritos ser un próximo single- se acerca al extinto quinteto, rondando más lo propuesto por Morrissey post The Smiths.
Lo anterior reafirma la libertad creativa que goza el oriundo de Manchester en estos momentos, y que repercute en su enorme capacidad para firmar un conjunto de piezas cohesionado, conciso y lejos de la pomposidad, producido totalmente por el mismo (algo inédito hasta la fecha) y con un invitado de lujo, Johnny Marr, quien participó en tres canciones: ‘Ballad of the Mighty I’, otra que se acerca a la pista de baile, además de las mencionadas ‘The Girl with the X-Ray Eyes’ y ‘You Can’t Go Back’. Con “Chasing Yesterday”, Noel Gallagher demuestra que la inspiración está intacta, entregando diez tracks que cimentan, otra vez, su altura de compositor consumado que, rozando el medio siglo de vida, consolida -al igual que sus adorados Paul Weller y Morrissey- su lugar entre los artistas más destacados que ha dado el Reino Unido en las últimas décadas.
Por Jean Parraguez.
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