Repentinamente me encontré con el sol,
era la luz que traías tú.
Cuando no estás que importa la luz,
si siempre estarás mirándome.
Por el día me iluminas
haciendo que transpire gotas de ilusión,
por la noche te estrellas
queriendo adueñarte de mi imaginación.
Es trágico e incierto
pero siempre tienes la razón,
la tristeza sólo estuvo en mi corazón.
Y si mis lágrimas están bajando por ti
no dejes que me moje más,
acércate y estréchate junto a mí.
Y aquí esta la hermosa luna sola y en paz,
por qué no le hacemos compañía
y contamos las estrellas para ver quien tiene más.
Las encuentro y las dejo a tu lado,
¿ves lo lindos que nos vemos acostados?
No me arrepiento de este amor,
de algún día haberte abrazado
y apretado para no soltarte más.
Así yo me sentía mejor,
era el paraíso entre los dos.
Toda mi vida esperé este horizonte
para que nos besáramos en ese viejo monte,
ya no tengo miedo de perderte
porque estás con tu hermosa luz
y sé que siempre estarás cuidándome.
era la luz que traías tú.
Cuando no estás que importa la luz,
si siempre estarás mirándome.
Por el día me iluminas
haciendo que transpire gotas de ilusión,
por la noche te estrellas
queriendo adueñarte de mi imaginación.
Es trágico e incierto
pero siempre tienes la razón,
la tristeza sólo estuvo en mi corazón.
Y si mis lágrimas están bajando por ti
no dejes que me moje más,
acércate y estréchate junto a mí.
Y aquí esta la hermosa luna sola y en paz,
por qué no le hacemos compañía
y contamos las estrellas para ver quien tiene más.
Las encuentro y las dejo a tu lado,
¿ves lo lindos que nos vemos acostados?
No me arrepiento de este amor,
de algún día haberte abrazado
y apretado para no soltarte más.
Así yo me sentía mejor,
era el paraíso entre los dos.
Toda mi vida esperé este horizonte
para que nos besáramos en ese viejo monte,
ya no tengo miedo de perderte
porque estás con tu hermosa luz
y sé que siempre estarás cuidándome.
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