La vida de Daniel Johnston, artista maníaco-depresivo, se encuentra inevitablemente marcada por fluctuaciones radicales, múltiples recaídas y tropiezos periódicos. Emparejado a su padecimiento, desde joven ha desarrollado ampliamente su talento artístico, abarcando cine, música y dibujo. El sorprendente retrato de un genio musical que estuvo a punto de desaparecer: un ejemplo perfecto de cómo la locura y el genio pueden caminar de la mano.
Daniel Johnston es un músico norteamericano que saltó a la fama gracias a unos especiales que hizo MTV sobre la escena musical de Austin, Texas y, bueno, también porque Kurt Cobain usaba una camiseta de su disco Hi, How Are You? Tras pasar un periodo que indicaba que Johnston era “the next big thing”, tuvo un colapso nervioso en el que casi se mata en un avionazo provocado por él mismo.
Durante la producción de este documental se tuvo acceso privilegiado a las grabaciones personales —tanto de audio como de video— del músico, convirtiéndose en la crónica de un desastre anunciado que, para fortuna de todos nosotros, tiene un final feliz. Johnston no sólo ha logrado seguir trabajando en hacer música, sino que se ha vuelto un ilustrador muy reconocido, y recientemente se publicó un libro de sus cómics. Si bien nunca tendrá una vida 100% normal, ha logrado cosas verdaderamente sorprendentes.
¿Sería tan famoso si no se hubiera hecho este documental? Posiblemente no, pero dado que comenzó su carrera en la era pre-Internet, eventualmente todos los melómanos serios hubiéramos llegado a él y estaríamos buscando sus casetes en Discogs. Tan conmovedor como cercano y cálido, este es un documental de esos que siempre hay que ver en pantalla grande y, si se puede, tener una copia en DVD a la mano.
El documental lo puedes ver aquí:
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