PROFESORA DENUNCIA USURPACIÓN DE IDENTIDAD

Hace 6 años la vida de Mary Ann Silva Tapia se convirtió, en sus palabras, en una verdadera pesadilla. Pero fue el verano del 2013 cuando esta profesora antofagastina denunció el hecho. Alguien había usurpado su identidad en Facebook y estaba usando sus fotos con los más turbios propósitos.

Como forma de luchar a esta situación, la docente recurrió a las redes sociales, subiendo un extenso y sincero video a YouTube, donde detalla todo lo que le ha pasado desde 2013 a la fecha, tiempo en que notó la suplantación cuando por las calles de Antofagasta, desconocidos la paraban, para comentarle lo que habían hablado antes por chat y que en realidad, nunca ocurrió.

Mary Ann, de 28 años, asegura que le cuesta salir de su casa. Que los niveles de stress y ansiedad que esto le ha provocado la han llevado incluso a terapia. Es que le ha pasado, al menos en tres ocasiones, que la han parado en la calle, hombres mayores, para recordarle coquetamente las acaloradas conversaciones vía chat de Facebook que supuestamente ha mantenido con ellos.

Pero no es ella. Es su suplantador. “Una persona que se transformó en mi pesadilla, que robó mis fotos y creó un perfil falso. Hablaba con gente, conocidos y desconocidos, manteniendo conversaciones sexualizadas, terroríficas, hasta incestuosas”, cuenta.

Puso un reclamo en Facebook, para que bajaran la página. La bajaron. Pero el impostor hizo otros perfiles en otras redes sociales. Hizo una denuncia en la PDI, pero aún no ha logrado nada. Se sabe, pillar a alguien a través de una IP es muy dificil. Según Mary Ann incluso la hicieron creer que ella era culpable por usar redes sociales. Este lunes subió un video a Youtube, se viralizó, y los perfiles falsos de la profesora fueron borrados.

En Chile no hay una legislación específica sobre suplantación o falsificación de identidad en Internet, pero sí se encuentra tipificado el delito de usurpación de identidad, en el artículo 214 del Código Penal. Especifica que el usurpador será castigado con presidio menor en su grado mínimo, sin perjuicio de la pena que pudiere corresponderle a consecuencia del daño que en su fama o intereses ocasionare a la persona cuyo nombre ha usurpado.

Según Silva, la persona que le ha suplantado la identidad intenta “vivir fantasías”. “Lamentablemente lo hace a través de mí. Y lo pienso porque se trata de alguien que ha usado mis fotos para coquetear con gente mayor”, indicó.

Respecto a un posible culpable, asegura que sospecha de alguien, pero que la denuncia debe confirmarlo. “Creo que es un ex amigo. Una persona que fue súper cercana a mí, pero no lo puedo asegurar porque no hablo con él desde que hice la denuncia en Fiscalía (en 2013)”, reveló.