En el pasado mes de septiembre se notificó, en la 4ª Fiscalía Militar de Santiago, la negativa a la petición de prescripción de las penas realizada por nuestro compañero Marcelo hace ya varios meses.
Inmediatamente Marcelo apeló a dicha negativa, quedando la resolución de la apelación en manos de la Corte Marcial en donde se reafirmó dicha negativa los primeros días de octubre.
Estas condenas corresponden a causas originadas por acciones enmarcadas en la antigua militancia en el Mapu-Lautaro, organización en la que nuestro compa fue activo combatiente desde muy temprana edad y de la cual, en prisión fue expulsado en 1995 por “desviaciones anarquistas”.
Marcelo purgó ininterrumpidamente 11 años dos meses y quince días desde el 13 de Octubre de 1992 hasta el 28 de Diciembre del 2003 quedando con reclusión nocturna hasta Marzo del 2005 en donde se le otorga la llamada “libertad condicional” que lo obliga a firmar semanalmente hasta cumplir 20 años de control penitenciario.
Los primeros días de Noviembre del 2007 a Marcelo se le sindica como participe del asalto al Banco Segurity, junto a otros compas mas, hecho en el que murió un policía y que provocó una respuesta del Estado sin precedentes. Marcelo decide pasar a la clandestinidad y en Febrero del 2008, en ausencia, se le revoca la “Libertad Condicional”.
En Marzo del 2008 es detenido en Argentina y en Septiembre del 2014 queda con condena firme a 14 años por dos asaltos bancarios.
En ese mismo período se le reactualizan los computos de penas relativos a las causas antiguas emanadas de la siempre siniestra “Justicia Militar” quedando de la siguiente manera:
- Asociación ilicita terrorista: 10 años y 1 día.
- Daños a vehículo fiscal con lesiones graves a carabineros: 3 años + 541 días.
- Coautor de homicidio calificado terrorista: 15 años y 1 día.
- Robo con intimidación, ley 18.314: 10 años y 1 día.
- Atentado Explosivo Embajada de España: 8 años.
En total estas condenas antiguas ascienden a un total de 46 años estableciendo como fecha de término febrero del 2056.
Hay una serie de irregularidades en los computos y aunque el tema jurídico no es hoy ni fue ayer nuestro punto de concentración único creemos que se hace urgente y necesario enfrentar esta situación que a todas luces representa una clara venganza en contra de un compañero que mantiene en alto sus convicciones subversivas de corte autónomo y libertario que nunca ha abandonado la confrontación directa por la liberación total, ni ha renunciado jamás a su historia de combate dejándola como mercancía para libros o galardones para traficantes de historias prestadas en donde se refugian cientos de renegados que deambulan por diferentes espacios pseudo-radicales.
Nuestro llamado es a dejar la palabrería y falsos gestos de solidaridad para enfrentar ésta y cada una de las venganzas que provienen del Estado como política constante hacia todos los que no reniegan de sus vínculos y convicciones.
Es hora de actuar, de hacer realidad aquello de que ningún compa en prisión está solo.
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