Este jueves se inició en el Tribunal Oral en lo Penal de Melipilla el juicio en contra de Guillermo Atenas Cornejo, el hombre imputado por el femicidio de la joven Isidora González Rojas, cuyo cuerpo fue encontrado descuartizado en las cercanías de un fundo, en septiembre de 2017.
La joven, oriunda de Concepción, había perdido el contacto con su familia hace varios días, pero la situación no los alertó porque “Dorito”, como la conocían sus amigos, solía viajar por el país durante semanas. Todo cambió el 7 de septiembre, el día en que el cuerpo de Isidora fue encontrado desmembrado y en avanzado estado de descomposición en un canal del sector de Huenchún, de la provincia de Melipilla.
La identidad de la joven fue confirmada gracias a un tatuaje de golondrina que González llevaba en su cuerpo, tras las pesquisas de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI). Tras ser detenido y reconocido como su pareja, Atenas confesó el crimen.
Se espera que el juicio se extienda por siete días: mientras la Fiscalía solicita una pena de cadena perpetua para el imputado por el crimen, el abogado de Atenas, Roberto Libretti, aseguró que intentarán demostrar que el sujeto “no está en condiciones de ser juzgado”, debido a un supuesto cuadro de esquizofrenia.
Mientras, durante esta semana, organizaciones punk y feministas convocaron a acompañar a la familia de “Dorito” en tribunales, con una serie de actividades como conversatorios, feria feminista, muralismo y talleres.
Defensa de imputado por femicidio de Isidora González: “No está en condiciones de ser juzgado”
“El fundamento y el peso de las evidencias que tenemos, y que en definitiva permitieron vincularlo con la víctima y el delito en sí, nos hace prescindir de su declaración, no obstante al momento de ser detenido refirió algunas palabras, en las que refería ser el autor de los hechos”, explicó el subprefecto de la PDI, José Ortiz Sandoval. Sin embargo, su abogado descartó esta versión.
Además, en la instancia, el Ministerio Público dio a conocer audios de una conversación sostenida entre el imputado y su madre, donde él le señala que “no me entrego ni cagando, prefiero suicidarme”.
Pese a que el juez Víctor Fernández desestimó la versión alegada por la defensa de Atenas, que acusó un cuadro de esquizofrenia por parte de su cliente, el defensor penal Roberto Libretti insistió en que “creemos que (Atenas) no está en condiciones de ser juzgado”.
Sin embargo, el fiscal José Solis argumentó que esta versión se contrapone con el registro de audio “donde él claramente sabe lo que hace y busca, en cierta medida, evadir la responsabilidad por el hecho delictivo”.
Además, argumentó que “de acuerdo con la investigación, ellos (víctima y victimario) estuvieron cerca de dos meses viviendo juntos, y los vecinos refieren que él siempre la agredía”.
Fuente: El Desconcierto.
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