El pasado sábado 17 de marzo se produjo un incidente en la Planta la Portada que pudo haber acarreado una grave detonación, colocando en riesgo la vida de los compañeros y compañeras que ese día se encontraban trabajando. La empresa rápidamente buscó instalar el discurso de que el incidente era responsabilidad de los trabajadores, como si los trabajadores de manera intencional hubieran querido poner en riesgo sus vidas y las de sus compañeros.
Sin embargo, bien sabemos que es la empresa la que no resguarda nuestra seguridad al no garantizar las condiciones laborales necesarias para ello, a lo que se suma el empuje de la empresa y las jefaturas, para producir más y más rápido, quedando claro que ellos aseguran sus bolsillos a costa de nuestras vidas.
Por ello entendemos, que cualquier incidente que ocurra dentro de la empresa, en cualquiera de sus plantas, deja en evidencia esta situación, tal como ocurrió en las detonaciones del 2012 y el 2016. Es más, este Sindicato tiene el conocimiento que horas antes del incidente comentado, durante una serie de pruebas, no se efectuaron los controles necesarios por parte de las jefaturas y la supervisión directa del proceso, pero las jefaturas obviaron este hecho, no segregaron correctamente la producción y echaron a correr la producción de todos modos, exponiendo a los trabajadores a un accidente. Aquí vemos nuevamente como la empresa no asume su responsabilidad en materias de seguridad, pues no genera ninguna acción contra las jefaturas, que de manera negligente obvió los procesos de seguridad para producir, sino que nos sigue responsabilizando a nosotros los trabajadores, recubriendo el despido de nuestros compañeros por “necesidades de la empresa”.
Relato de los propios despedidos
También pudimos acceder al relato de los propios despedidos, quienes señalan que la causa del despido por “necesidades de la empresa” es falsa, esto debido al aumento de los niveles productivos de la fábrica y la apertura de un proceso de contrataciones. Reflexionando a la vez, sobre el descaro y grave actuar de los empresarios de Orica, de responsabilizar a los trabajadores por el incidente ocurrido, cuando han sido ellos los responsables de tener graves problemas en las condiciones de seguridad e higiene, cuestión que incluso, ha arrebatado la vida de compañeros, como Miguel Araya, quien perdió la vida en una detonación el año 2016.
Javier Andrades, despedido por práctica anti-sindical también de Orica, refería que “no estamos frente a un problema sólo de seguridad, la empresa por debajo quiere por todos los medios desarticular y desunir la organización de los trabajadores, generando terror en nuestros compañeros mediante despidos como estos, por ello la clave está en pensar que si dejamos que la empresa siga pasando por encima de nosotros sin que digamos nada, le estaremos abriendo el camino para hacer y deshacer con nuestros derechos, nuestras vidas y la de nuestras familias, por ello es más importante que nunca la unión y fuerza del sindicato”.
Llamado a asamblea
Finalmente, Lester Calderón recalcó que bajo este escenario toda conquista anterior, alcanzada por el sindicato con organización y lucha, podría ser arrebatada, sumado a que ningún puesto de trabajo esta asegurado. “Ésta situación nos exige organizarnos y tomar medidas o acciones contra los despidos y por la reincorporación de los compañeros despedidos. Esta será la discusión central de la asamblea a realizarse este sábado 24 a las 19.00 horas, en el club Velocidad”. Además, el dirigente añadió la relevancia de unirse como trabajadores a otros sectores que vienen cruzados por problemas similares, con la finalidad de tener mayor fuerza y alcance de sus demandas, como lo son los docentes con despedidos masivos, varios por persecución de las empresas o por prácticas anti-sindicales, quienes realizarán una marcha este martes 27 de marzo a la cual es clave sumarnos.
El trasfondo de todo esto, es que la empresa con despidos busca golpear la organización que hemos logrado estos años. La empresa sabe que si nos golpea y no hacemos nada podrá continuar con los despidos selectivos y continuará acelerando la producción. Las preguntas que debemos hacernos son: ¿vamos a esperar que hayan más despidos? ¿que se produzca un accidente fatal? ¿que las perdidas de contratos por la empresa pongan en tela de juicio la estabilidad laboral de los trabajadores dentro de las plantas?
Nuestro sindicato necesita deliberar sobre que medidas tomaremos para frenar esta nueva ofensiva de la empresa, es por esto que llamamos a todos los trabajadores para participar en la Asamblea General que realizaremos este sábado 24 a las 19.00 en el Club Velocidad.
Así mismo llamamos a los trabajadores a no exponerse a ningún peligro, por lo mismo les invitamos a denunciar los problemas de seguridad y no dejarse pasar a llevar por las jefaturas, ni por su hostigamiento en la producción que lo único que puede lograr es aumentar sus ganancias y poner en riesgo nuestras vidas.
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